Mis antepasados más remotos fueron paganos; los más recientes, herejes.

lunes, 1 de noviembre de 2010

El peligro de los chemtrails

Pasan cosas raras todo el tiempo pero lo curioso es que no nos damos cuenta de ello. Uno de los momentos más desconcertantes de este verano fue aquél en el que, reposando por la tarde junto al mar mientras leía la fenomenal edición de Gredos de la apasionante Vida de Apolonio según Filóstrato, me fijé en las extrañas estelas que un par de aviones dibujaban en un cielo azul y absolutamente limpio de nubes. Me quedé observando el fenómeno un rato largo, porque aquellas estelas no parecían normales. De hecho, no eran normales. En ese instante no tenía ni idea, pero ahora sé (gracias a Mac Namara, por supuesto) que su nombre en la gran familia de los conspiranoicos es chemtrails...
 
He visto miles de aviones volando (y he montado en alguno que otro) y muy rara vez hasta entonces me había encontrado con aparatos que dejaran semejantes rastros de humo blanco. Lo normal es que se desplacen sin dejar huella, como el de la foto de arriba, y, si la dejan, que ese contrail o estela de condensación como se llama técnicamente desaparezca a los pocos segundos, según vemos en esta comparación de la izquierda.
Los aviones a los que me refiero parecían volar muy alto, más de lo habitual, lo que me lleva a pensar que las estelas que creaban, en el mismo momento de aparecer, eran inmensas aunque luego crecieran aún más a medida que se expandían poco a poco. Además, sus trazos formaban figuras en el aire: líneas paralelas primero, grandes aspas y cuadrados después, al cruzarse perpendicularmente los vuelos. Alternando mi vista entre el cielo sobre mi cabeza y las peripecias de Apolonio y su colega Damis a la altura de Mesopotamia, contemplé con cierto asombro cómo las estelas de los misteriosos aparatos se desdoblaban sobre sí mismas hasta transformarse en una especie de nubes lechosas, de aspecto pringoso que ensuciaban las alturas...

¡Y que empezaban a caer lentamente sobre mí y sobre el resto de personas que nos encontrábamos allí en ese momento!  Sin embargo, nadie hizo ni un solo ademán de salir corriendo presa del pánico ante el insólito bombardeo (seguramente porque nadie se había preocupado de mirar hacia arriba para ver lo que ocurría sobre su cabeza, como yo no lo había hecho hasta aquel día).  A medida que las "nubes" o lo que fuera se acercaban al suelo, contemplé estupefacto cómo se iban deshilachando hasta deshacerse literalmente. Una de ellas estuvo encima de mí, cayendo a cámara lenta, y pude observarla bien cuando, calculo, se encontraba apenas a unos diez o quince metros por encima. Regresé unos instantes a la lectura pero tras cuatro o cinco párrafos no pude resistir más y volví a mirar hacia arriba y ¡los restos de la estela misteriosa habían desaparecido! Ni rastro de ella y el cielo volvía a estar igual de azul que de costumbre, como si aquellos aviones no hubieran pasado sobre nosotros. Pensé: ¿Qué demonios nos han rociado encima? ¿Y quién ha sido el "simpático" que lo ha hecho?
 
Esta curiosa experiencia creó en mí la necesidad de practicar un nuevo hobby: la observación del cielo en busca de nuevas estelas inquietantes y, para mi sorpresa, descubrí que los chemtrails son casi omnipresentes ahí arriba. Da igual que nos encontremos en la ciudad o en el campo, en la playa o en la montaña, la hora o la fecha que sea... Los he visto desde entonces casi a diario, ahí en lo alto, y muy diferentes de las nubes reales aunque a veces tiendan a confundirse. Esta composición de fotos aquí arriba a la izquierda me la enviaba hace unos días mi amigo Juan: las imágenes están tomadas el pasado domingo 24 de octubre entre las 08:30 y las 10:00 en algún lugar de Madrid, pero podrían haber sido captadas en cualquier otra parte a cualquier otra hora.

- 'Chemtrail' significa 'estela química' -me informó Mac Namara- porque ese rastro no lo produce la condensación de los aviones como sucede en el caso del 'contrail'. La palabreja se la inventó un periodista llamado William Thomas y la hizo pública en 1999. Se han visto chemtrails en la mayor parte de lo que alegremente denominamos "mundo civilizado". Es la prueba más evidente de que alguien con mucho poder está experimentando, una vez más, con la población civil y que la susodicha población se parece cada vez más a un rebaño de borreguitos porque muy poca gente parece fijarse en los chemtrails y desde luego no se preguntan para qué sirven..

- ¿Qué significa eso de la experimentación sobre la población civil? -le pregunté, alarmado- Que yo sepa, los gobiernos democráticos no emplean ciudadanos normales para probar nada, sin avisarles antes. 

- Jajajajamiaujajaja -se rió el condenado- No deja de sorprenderme tu ingenuidad. Te recomiendo un reportaje que se publicó este pasado fin de semana en el 'XL Semanal'  titulado 'Las cobayas humanas del doctor Sífilis' a propósito de cierto experimento realizado por el muy demócrata gobierno estadounidense con cerca de 700 guatemaltecos. Un tipo llamado John Cutler infectó con sífilis a presos, soldados, prostitutas y pacientes psiquiátricos "en el nombre de la ciencia"... No fue el único, ni siquiera el primero. Por citar algunos ejemplos, Francia probó los efectos de las radiaciones sobre sus propios soldados, sin decirles nada, durante sus ensayos con bombas atómicas en el desierto norteafricano. El Reino Unido roció varios gérmenes en secreto sobre Londres y otra docena de localidades del sur de Inglaterra durante los gobiernos de Harold Wilson y Edward Heath para estudiar los posibles efectos de una agresión bacteriológica. Estados Unidos tiene a sus espaldas diversos experimentos además de los de Cutler, como los ensayos bacteriológicos sobre San Francisco, el proyecto SHAD que afectó a  decenas de miles de marinos con agentes químicos y bacteriológicos o el experimento Tuskegee también relacionado con la sífilis... Te asombrarías de las cosas que hacen, que están haciendo en este mismo momento, tus "gobiernos democráticos".

- Bueno, vale, ya me contarás eso en detalle en otro momento pero dime: ¿para qué sirven los chemtrails?

- Quizá para controlar el clima..., o para alterarlo. Mira: ahí podríamos tener un origen heterodoxo del famoso "cambio climático". O tal vez permitan probar fármacos a gran escala sobre la población... ¿Nunca te has preguntado cómo es posible que las autoridades sanitarias mundiales puedan predecir, por ejemplo, cuándo aparecerá la próxima gripe anual y cuáles serán sus características principales, teniendo en cuenta que en teoría nadie puede saberlo ya que se trata de una mutación variable y distinta cada vez? Claro que a lo mejor lo que están haciendo es probar sus nuevos tranquilizantes, para mantener a la población adormilada, indiferente, permisiva y obediente al régimen tiránico que nos gobierna en secreto.

- Paranoias...

- Ah, ¿sí? Clifford E. Carnicom, uno de los primeros investigadores norteamericanos que hablaron sobre este asunto, reveló hace ya unos siete años lo que le había contado cierta fuente militar. Según ésta, los chemtrails esconden una operación mano a mano entre el Pentágono y la industria farmacéutica para probar armas biológicas a gran escala empleando a los ciudadanos como conejillos de indias. Su objetivo final sería mejorar en la medida de lo posible los medios masivos de control de población rociando de forma directa y eficiente todo tipo de drogas y enfermedades. La fuente de Carnicom especificó que el procedimiento pasaba por deshidratar por congelación una serie de virus y bacterias que luego serían arrojados junto a unos finos filamentos desde los aviones. Una vez liberados, el calor del sol, y eso explica por qué no ves chemtrails en días nublados, reaviva a los microorganismos que, al llegar a tierra, están ya operativos y pueden infectar al ser humano y reproducirse. La misma fuente aseguraba que la mayoría de los países donde se practican estas fumigaciones no han sido prevenidos ni han dado un permiso expreso para ello. Aunque quizá desde entonces para acá las cosas hayan cambiado. Igual les han informado de lo que se está haciendo..., para que controlen los medios de comunicación ya que este tema parece uno de los estrictamente prohibidos por los censores oficiales: nunca aparece en periódicos ni en medios audiovisuales.

- Si todo eso es cierto... Dime: ¿qué podemos hacer?

- ¡Qué podemos hacer, qué podemos hacer...! Siempre terminas tus consultas con la misma pregunta -contestó irritado Mac Namara- No sé lo que podemos hacer. Tú eres el que está estudiando para Dios así que tú sabrás lo que podemos hacer.
 
Es 1 de noviembre y celebramos el Samhain, el Año Nuevo Celta en el que el velo con el Otro Mundo se descorre durante unas horas..., aunque los mortales corrientes ignoran el carácter sagrado de la fiesta y en lugar de honrarla se dedican a embellecer cementerios donde nada queda salvo cascarones astrales y abono para la Tierra, o a vestirse de calaveritas mariachis o a maquillarse como monstruos de cartón piedra (truco o trato, qué costumbre tan repugnante ésa de enseñar a los niños a chantajear a los demás). Es 1 de noviembre y tenía que contar una historia de terror, así que ¿qué mejor que una real?

4 comentarios:

  1. ¡Cuándo filtrarán a wikileaks -¡ a ver si hay soldados voluntarios que filtren, serían héroes de la humanidad!- estos desmanes y otros que están en archivos de secretos de estado esperando que expiren los plazos! ¡Alto a la ciencia sin conciencia!

    JS

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  2. Los políticos, militares y grandes empresarios respiran el mismo aire y viven bajo la misma atmósfera que el resto de habitantes del planeta.

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  3. yaaa ... se me hacia interesante hasta que leí lo ultimo respecto a "Samhain" ... me rei entonces ... saludos ... atte. carlos

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