Mis antepasados más remotos fueron paganos; los más recientes, herejes.

lunes, 31 de enero de 2011

Las revueltas de Egipto y el mundo árabe en general

A Mac Namara se le puede acusar de muchas cosas, pero no de ser un gato indocumentado. Es increíble las cosas que sabe el muchacho, para ser un felino. Esta tarde me hablaba de la crisis del mundo islámico como si la hubiera diseñado él mismo.

- Sólo te voy a dar datos, que es lo único que parece convencerte -me decía-. Cómo se nota que trabajas de periodista en esta reencarnación... Siempre buscando fuentes. Desde mitad de los años ochenta del siglo pasado tanto EE.UU. como la UE han intentado establecer instrumentos clave de penetración económica y política en los países islámicos. En el caso europeo, por ejemplo, con la Asociación Euromediterránea y, en el amerciano, con la Asociación de Libre Comercio con Oriente Medio. Pero en junio de 1997, durante la presidencia de Bill Clinton, un grupo de políticos, intelectuales y mangantes..., digo, magnates norteamericanos se reunieron en uno de estos cónclaves que tanto gustan al otro lado del Atlántico y que alguien bautizó con el alienígena nombre de "Think Tank" o "Tanque Pensante". Tenían en común sus simpatías o directamente su pertenencia al Partido Republicano y, de hecho, entre ellos figuraban nombres que deberían sonarte como Jeb Bush, Dick Cheney, Donald Rumsfeld, Paul Wolfowitz ... Y hasta Francis Fukuyama, el listillo aquél que decía que la Historia se había terminado con la caída de la URSS. Esta gente redactó entonces una declaración de principios que difundieron con el nombre de Proyecto para el Nuevo Siglo Americano. Y más claros no pudieron ser en su redacción, que incluía objetivos como "concentrar los esfuerzos para el liderazgo global estadounidense" y "delinear un nuevo siglo favorable a los principios e intereses americanos". En realidad, cuando hablan de intereses americanos, o mejor dicho estadounidenses, se refieren a los intereses no del pueblo norteamericano en general, que es tan ingenuo como los del resto del mundo o quizás aún más, sino los de la despiadada y alógena elìte que domina su nación y, a través de ella, buena parte del planeta. Pues bien, ese informe escrito hace ya casi 14 años, advertía que para garantizar el dominio del mundo Estados Unidos tendría que "promover en el exterior la causa de la libertad económica y política" así como "fortalecer nuestros lazos con los aliados democráticos y desafiar a los regímenes hostiles a nuestros intereses y valores". Insisto: tómese lo de "nuestros intereses" no especialmente como referido a los intereses del pueblo americano sino de sus dirigentes.

- No es nada demasiado extraño lo que me cuentas -aduje- Estrategias...

- Déjame que termine. En septiembre de 2000, la misma fuerza ideológica que había impulsado el documento anterior, publicó uno nuevo titulado "Reconstruyendo las defensas de EE.UU.: estrategia, fuerzas y recursos para unn nuevo siglo". El borrador lo escribió el mismo Wolfowitz que poco después entraría en el gobierno de George Bush junior, sucesor de Clinton en la Casa Blanca. Allí se hacía una referencia directa a la primera guerra del Golfo desatada por George Bush senior con las siguientes palabras: "Durante decenios, Estados Unidos ha buscado desempeñar un papel permanente en la seguridad regional del Golfo. El irresuelto conflicto con Iraq proporciona la justificación inmediata, pero la necesidad de una presencia importante de fuerzas estadounidenses en la zona trasciende la cuestión del régimen de Sadam Husein". Vamos, que lo de defender a Kuwait y al mundo libre en general del cabeza de turco o, mejor dicho, del cabeza de iraquí de Sadam era una simple excusa, como por otra parte ya sabíamos.

Me encogí de hombros.

- Seguimos en lo mismo. Ya sabemos que los norteamericanos querían una presencia constante en la zona para el control del petróleo y...

- No sólo del petróleo -cortó mi gato-. En este juego hay algo tan importante o más como eso y es la defensa del Estado de Israel, cuya ascendencia y control sobre los gobernantes norteamericanos es un secreto a voces y ha llevado a EE.UU. a actuar en numerosas ocasiones como una especie de mayordomo al servicio del gobierno israelí y de sus intereses, no de los de los propios estadounidenses. La misma guerra de Iraq no fue tanto para tumbar a Sadam como para satisfacer el deseo de Israel de destruir a un enemigo que estaba haciéndose tan poderoso como para llegar a hacerle sombra como la gran potencia militar regional.

- Es tu opinión...

- Más datos. El 6 de noviembre del 2003 el ya presidente George Bush junior dijo en Washington D.C.: "EE.UU. ha adoptado una nueva política, una estrategia avanzada de libertad para Oriente Medio, que requiere la misma persistencia, energía e idealismo que hemos demostrado anteriormente y conducirá a los mismos resultados. Igual que en Europa, sucederá en Asia y en cada región del mundo, ya que el avance de la libertad conduce a la paz". Es decir, tenemos bajo control a los europeos y lo mismo vamos a hacer con el resto del mundo. La paz a la que se refería es muy similar a la famosa Pax Romana, lo que por aquí siempre se ha llamado la Paz de los Cementerios. Ese mismo año de 2003, los responsables de la Liga Árabe, en su mayoría occidentalizados y ya bajo las indicaciones de Washington, reconocía en un documento su determinación de "establecer firmemente las bases para la democracia". Y, ya vamos entrando en materia, en 2005, el Washington Post, el diario más influyente de EE.UU. después del New York Times, se descolgaba con las siguientes palabras: "Incluso Egipto, aliado histórico de Estados Unidos y considerado en años anteriores un ejemplo de organización electoral, libertad de prensa y pluralismo político en el mundo árabe, fue objeto de fuertes presiones por parte de Washington. 
Condoleezza Rice (entonces secretaria de Estado), durante su discurso en la Universidad Americana de El Cairo, expresó que el gobierno de Hosni Mubarak debía apresurar la democratización del sistema político egipcio". En aquella época, ya algunos analistas publicaron que "no es descartable que sectores sociales en algunos países árabes como Egipto, Jordania o Arabia Saudita reclamen mayores reformas y cambios en la manera de gobernar".

- Vaya, vaya... Ahí empiezas a ponerte interesante -reconocí.

- Aaaah, pero un poco antes de la publicación del Washington Post, el 9 de febrero de 2004, Bush junior había presentado un ambicioso Plan para el Gran Oriente Medio destinado, cito textualmente, a "promover un cambio sustancial político, económico, social e ideológico" implantando (aunque no especificaba cómo exactamente) "una serie de reformas" que llevarían implícitas los mantram habituales de "democracia", "derechos humanos", "Estado de Derecho", "sociedad civil", "avance de la mujer", etc. Todo ello, a aplicar en un espacio definido como "islámico" y al cual se asociaba entonces, como se asocia hoy, con "inestabilidad", "terrorismo", "armas de destrucción masiva", "pobreza" y "subdesarrollo". Como quiera que el Plan pareció entonces demasiado agresivo, cuatro meses después, exactamente el 9 de junio de 2004, Bush junior presentó una variante más "light" en la cumbre del G-8 celebrada en Sea Island, en Georgia, EE.UU., y con presencia de representantes oficiales de países árabes como Túnez, Jordania, Yemen y otros. Esta iniciativa adoptó el nombre de Asociación para el Progreso y el Futuro Común con las Naciones Islámicas y la idea era extenderla en una vasta área geográfica definida como Amplio Oriente Medio y Norte de África. Sus objetivos declarados en esta cumbre: "avanzar en libertad, democracia y prosperidad en la región". El G-8 apoyó de manera explícita esta "propuesta de reforma" que debía provocar "transformaciones internas en los ámbitos políticos, económicos, sociales y educativos de los países de la región". No sé si te das cuenta de lo que significa todo esto...

- Creo que voy haciéndome una idea.

- El proyecto del Amplio Oriente Medio y Norte de África abarcaba un espacio geográfico colosal, tratando de unificar escenarios humanos, políticos, económicos, sociales y culturales tan distintos como Marruecos y Afganistán o Libia y Pakistán. Una veintena de países que sólo poseen una cosa en común: su religión mayoritaria hoy en proceso de demonización (cuando el musulmán corriente no es más peligroso ni más terrorista que el católico corriente o el judío corriente). La meta final era la disolución de esa identidad que conocemos hoy como "mundo árabe" aunque incluya a países que siendo islámicos no son árabes como los persas iraníes, por ejemplo. Un ejemplo de la destrucción de las raíces de estos países para su sustitución por las bondades del sistema democrático contemporáneo fue la constitución transitoria diseñada para Iraq en 2004 (y aprobada tan ilegítimamente por surgir durante la ocupación norteamericana de la zona como lo fue la Constitución francesa impulsada por Pepe Botella durante la invasión napoléonica en España previa a "la Pepa" aprobada en las Cortes de Cádiz en 1812) que por vez primera en la historia de las constituciones árabes destruía la definición de Iraq como "país árabe" y "miembro de la Nación Árabe".


- Entonces, según tú, ¿el objetivo final sería "desislamizar" la región?


- Más bien, globalizarla, "occidentalizar" de verdad los países islámicos colocándolos bajo el liderazgo de Israel y al servicio del plan general de uniformización del mundo. Entre las reformas previstas por el Amplio Oriente Medio y Norte de África se incluían como puntos básicos: "modificar los sistemas de gobierno atendiendo al referente dle modelo de la democracia prlamentaria occidental", "modificar las administraciones públicas y las legislaciones de los Estados en materia económica y judicial" y "fortalecer la sociedad civil especialmente a través de las ONGs y con un nuevo sistema educativo que contempla (...) la edición de nuevos libros de texto, la elaboración de nuevos programas educativos y la formación del profesorado conforme a prácticas y métodos proporcionados por los países del G-8". Cuando leí todo esto hace cuatro años, porque todo esto se publicó en la Prensa, pensé que Bush junior y sus asesores tenían tanto tiempo libre ya que se dedicaban a escribir cartas a los Reyes Magos porque me parecía muy irreal todo...

- Y de repente empiezan las revueltas en el Norte de África... Las masas se levantan...

- Las masas nunca se levantan sino que son levantadas. La gente que sale a la calle a vociferar, protestar y, si es posible, saquear, nunca lo hace "motu proprio" sino manipulada y/o empujada. Lo que llamamos "revolución" no es más que la palabra que simplifica este concepto: "masas arrojadas como armas contra el gobierno vigente gracias a la manipulación de pequeños grupos opositores". Todos esos manifestantes produjeron, eso sí, un acelerado Efecto Dominó. Y con detalles curiosos si te pones a analizarlos. En Túnez, por ejemplo, todo el mundo sabía acerca de la corrupción de la esposa de Ben Alí y sobre los defectos del régimen. Sin embargo, nadie había levantado un solo dedo para protestar en tantos años... De pronto, de un día para otro se montan unas manifestaciones multitudinarias y en muy poco tiempo Ben Alí y su mujer huyen. ¿Cómo perdieron con tanta rapidez el apoyo que les había permitido dirigir el país sin problemas tantos años? Otra pregunta que se me ocurre: ¿por qué se producen los levantamientos en Túnez y en Egipto mientras que en Libia, que está en medio, no se oye el vuelo de una mosca? Y se me ocurren muchas más.

- Tu conclusión es...

- Blanca y en botella. Estamos ante la aplicación práctica del plan Amplio Oriente Medio y Norte de África.


- ¿Y no te resulta extraño -argumenté- que los propios EE.UU. hagan tambalear a su principal aliado en la zona, Egipto? ¿Qué pasa con los terroristas islámicos fanáticos?

- A ver cuándo te enteras de que no es una cuestión de EE.UU. sino de los que gobiernan EE.UU. y aprovechan esta circunstancia para promover el dominio mundial. Se trata de eliminar a los corruptos dictadorzuelos nacionales..., para sustituirlos por corruptos demócratas globalizadores. Y de esta manera poner bajo su control a una enorme porción de la Humanidad que en este momento no lo está. Los islamistas radicales son un ingrediente más en todo este mejunje para meter miedo e impulsar la aplicación del plan de la manera correcta...


- Mmmh, no sé... A pesar de tantos datos, tengo dudas sobre tus sospechas.


 - Pues estáte atento a las noticias de los próximos días, majete -concluyó.

viernes, 28 de enero de 2011

Noticias de risa

A propósito de lo que comenté esta misma semana sobre mi afición a reír, la verdad es que la Prensa diaria (entiéndase por Prensa todos los medios de comunicación, no sólo los escritos y en papel) suele ser bastante generosa a la hora de facilitarme todo tipo de argumentos para recorrer el amplio espectro que va desde la sonrisa más fugaz hasta la más estentórea de las carcajadas. En ocasiones he tenido que releer varias veces las informaciones para cerciorarme de que sí, de que contaban exactamente lo que acababa de leer, por increíble, extravagante o alucinado que pareciera en primera instancia el texto. Y después de reírme una primera vez, lo he hecho al menos una segunda al imaginarme los apuros del periodista encargado de elaborar la información, dudando de si facilitarla o no por temor a perder su credibilidad profesional. Por poner algunos ejemplos sencillos, aquí van algunas de esas noticias de risa, recogidas en las últimas semanas del servicio de la Agencia EFE:

* "LOS NEOZELANDESES ESTÁN TAN GORDOS QUE YA NO CABEN EN SUS ATAÚDES. 17 diciembre 2010. La población de Nueva Zelanda está engordando tanto que su peso se ha convertido en un problema para las funerarias, pues los ataúdes más amplios ya no caben en los nichos de los crematorios. Eso obliga a muchas familias a gastarse más dinero en comprar o alquilar tumas en cementerios, mientras la anchura media del féretro ha sido ampliada de 48 a 58 centímetros (...) Por si esto no fuera suficiente, los féretros de gran tamaño tienen que ser enterrados en los extremos de las filas dentro del cementerio, para que no derriben a otras tumbas (...) Uno de cada cuatro neozelandeses padece obesidad, según datos del Ministerio de Sanidad."

(Entre paréntesis, se me ocurre alguna forma un tanto bárbara de solucionar el problema, echando mano de un serrucho como sucedía en algunas de las morbosas y divertidas historias de Tales of the Crypt o de Creepy.)


* "LIAM GALLAGHER CUENTA QUE UN FAN ESNIFÓ SU CASPA PENSANDO QUE ERA COCAÍNA. 21 enero 2011. Un fan de Oasis esnifó la caspa que Liam Gallagher tenía en el pelo, pensando que era cocaína, tras una actuación del grupo en el Festival de Glastonbury. (...) El músico, con un reconocido historial de consumo de cocaína, explica que padece psoriasis en buena parte de su cuerpo (...) el episodio ocurrió en presencia de numerosas personas tras un concierto. A buen seguro que la historia servirá para consolidar el término de 'caspa del diablo' para referirse a la cocaína."

(Será por eso por lo que ahora luce sombrero... Pero esto, también entre paréntesis, me recuerda la historia de otro rockero, Keith Richards de los Rolling Stones, del que su nutrida leyenda negra asegura que esnifó parte de los huesos molidos de su propio padre. Él, por supuesto, lo niega, pero vaya usted a saber...)

* "LANZAR HUEVOS A LA POLICÍA ES UN DERECHO DEMOCRÁTICO, SEGÚN UN TRIBUNAL TURCO. 27 enero 2011. Un tribunal turco declaró esta semana que lanzar huevos a la policía es un derecho democrático (...) En los últimos meses, tirar huevos en las manifestaciones y contra los miembros del gobierno se ha popularizado como protesta, por lo que se ha creado un ingenso debate en la opinión pública (...) 'Mejor podríais haber hecho una tortilla', respondió enfadado el primer ministro Erdogan."

(Imagino, para no perder la costumbre también entre paréntesis, que el tribunal se refiere a lanzar huevos frescos, porque arrojar huevos duros debe hacer un efecto similar al de arrojar piedras. No hay más que ver la cara de enfadado del propio Recep Tayyip Erdogan. Resulta curioso e incluso desolador hasta qué punto nuestra sociedad contemporánea lo reduce absolutamente todo a si un acto concreto es "democrático" o no lo es. No importa que el acto en cuestión sea o no moral, sea o no justo, sea o no útil..., sólo si es democrático o no lo es -y si es democrático de acuerdo con los estándares contemporáneos-. Se le da todos los parabienes en el primer caso, sin ir más allá, y se le anatematiza en el segundo caso, también sin ir más allá).

Noticias como éstas provocan una risa sana..., pero otras informaciones que también generan carcajadas son verdaderamente lamentables desde el punto de vista humano, ético y consciente. La última la he leído el mismo día que lo de los turcos y los huevos, pero mi reacción fue diferente. En lugar de reírme alegremente, sonreí con amargura. El titular es el siguiente: "LOS PODEROSOS REUNIDOS EN DAVOS PUEDEN "SENTIRSE" POR UN DÍA REFUGIADOS."

Para los despistados que no estén al tanto de lo que ocurre día sí, día también, recordamos que estos días se reúnen en la archimilitarizada pequeña villa suiza de Davos (en su Foro Económico del Congress Center abierto a los periodistas y en las múltiples reuniones privadas y opacas que se organizan en diversos despachos en todo el pueblo) algunos de los mandos intermedios más poderosos de la organización piramidal que dirige la globalización: ésos cuyo máximo objetivo es el dominio del mund..., es cuidar de sus pueblos y del planeta generando las mejores condiciones de vida para todos, quería decir. Como buen especialista en conspiranoias (él fue quien me reveló que, si escoramos el logo de este acontecimiento, tendremos un triple 6 al atravesar la curva que se supone representa el planeta, una o de cada una de las tres palabras en inglés: World Economic Forum), mi gato Mac Namara se marchó a Davos hace un par de semanas o así y lleva instalado allí desde entonces, espiándoles y recogiendo todo tipo de informaciones sensibles..., aunque la noticia cuyo titular he adelantado no me la facilitó él, sino que la recogí directamente de un teletipo.

Esta peculiar información asegura que "los ricos y poderosos reunidos en Davos pueden 'sentir' qué significa ser un refugiado, sólo con visitar el auténtico 'campamento' que la agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, ha montado a las puertas del exclusivo Foro". Se refiere al Refugee Run, un edificio pequeño que, a pesar de estar rodeado de hoteles de cinco estrellas, pretende simular un centro de retención de los muchos que hay por el mundo adelante. Los organizadores de esta especie de morbosa atracción de Disneylandia pretenden que los participantes en el Foro (por cierto, para aquéllos que se estén planteando participar en la próxima edición, que sepan que el coste -sólo en lo económico- es de 50.000 francos suizos -cerca de 38.500 euros- en calidad de contribución anual y de otros 18.000 francos -casi 14.000 euros- más por la inscripción puntual para el acontecimiento) "se sientan en la piel de lo que es ser un refugiado, que sientan el miedo, la desesperación, la falta absoluta de control de lo que les está ocurriendo".

El teatrillo dura una media hora, durante la cual el poderoso político o directivo de turno debe asumir alguno de los papeles que se le asignan o varios a la vez: desde convertirse en padre de familia separado de sus hijos mientras es hecho prisionero, hasta asumir que ha resultado herido o mutilado por una mina antipersonal o maltratado por un grupo de militares bien armados, pasando por la persecución de los miembros de un grupo étnico contrario al suyo, y otras experiencias similares. "Ser apuntado con una metralleta, ser insultado, empujado y separado de tus acompañantes, tener que desprenderse de la alizanza a cambio de un pedazo de pan o en caso de ser mujer ser vendida como prostituta" son algunas de las emocionantes aventuras con las que pueden entretenerse durante un rato los participantes en la sesión.

Según la sonriente Sally L. Begbie, directora de la ONG que ha montado oficialmente este espectáculo, la Crossroads Fundation, "en los dos últimos años hemos invitado a altos cargos de empresas que han vivido la experiencia y muchos han quedado en contacto con nosotros (...) caso de Microsoft, Facebook o Wikipedia, que mantienen el contacto con nuestra ONG". Y luego Tapio Vahtola, Director de Relaciones Empresariales (sic) del ACNUR, añade lo más importante: "Gracias a este proyecto, algunas de las empresas presentes en Davos participan de forma regular en nuestro programa global de corporaciones, colaboran con el Día Mundial del Refugiado, a veces hacen aportaciones económicas..."  Vamos, que se trata de pasar la hucha con la excusa de una concienciación de los que mandan que, huelga decirlo mirando a nuestro alrededor, no parece que sea demasiado profunda.

jueves, 27 de enero de 2011

Punto de vista

- Malditos terrestres: ellos lo han querido...

El comandante del crucero de guerra interestelar Morbidus Drake Telonium ordenó detonar el misil nuclear a bordo de su nave. Habían viajado desde muy lejos demasiado tiempo para traer un mensaje de paz a la Tierra y los habitantes de aquel primitivo planeta les habían engañado. Tras facilitarles unas coordenadas engañosas para aterrizar, les habían atrapado en un silo orgánico provisto de unas babas inmundas pero eficazmente pegajosas que envolvieron e inmovilizaron el crucero con sus trescientos tripulantes y toda su tecnología de última generación. Seguramente pensarían retenerles allí mientras estudiaban la mejor forma de apoderarse de ellos y de sus secretos por la fuerza. Pero los terrestres no contaban con la fiereza de los guerreros de su raza, dispuestos a destruirse a sí mismos, y al planeta entero de aquéllos que habían osado capturarles, antes que caer en manos de un enemigo tan traicionero.

Cuando el técnico de alto nivel del Área 51 Alfred Fox Bernstein falleció mientras toda la base permanecía en alerta esperando infructuosamente la llegada de la nave extraterrestre que había contactado con ellos horas antes anunciando su inmediata llegada y que jamás apareció, sus jefes pensaron que se trataba de un derrame provocado por contaminación radiactiva. La autopsia reveló que la microexplosión se había producido en el interior de su nariz y desde allí la onda expansiva había afectado de manera letal al cerebro.
 

miércoles, 26 de enero de 2011

El secreto del japonés

Japón acaba de perder el segundo puesto como superpotencia de la economía mundial tras más de cuarenta años sólo por detrás de EE.UU. (aupada en lo más alto de la tabla gracias a ese arma formidable que es el billetito verde llamado dólar, más que por su competitividad o su productividad reales) y lo ha hecho en favor de la que se supone acabará siendo a no mucho tardar la primera de las superpotencias: China, el gigante de moda (gracias a su masiva población, más que a otra cosa, ya que 1 de cada 5 humanos son en la actualidad de origen chino). Sin embargo, el modelo empresarial y de producción del país del Lejano Oriente no ha dejado de ser válido. Es más, resulta interesante estudiarlo de cerca para aprender algunos principios interesantes que podríamos aplicar en diversos proyectos de la vida diaria que queramos ver realizados. 

Precisamente estaba dándole vueltas a este asunto (serendipias...) cuando me llegó el correo de un amigo en el que se resumían magistralmente varios de esos principios a través de una conferencia que ofreció Carlos Kasuga Osaka (aquí a la derecha en pleno mítin), el mandamás de la división mexicana de la empresa Yakult, en la primera convención nacional de emprendedores universitarios que se desarrolló en México. En esa conferencia, Kasuga Osaka reconocía ser hijo de inmigrantes japoneses que se instalaron allá por los años treinta en la tierra de Pancho Villa. Como él resumía brillantemente: "Soy de fabricantes japoneses pero ensamblado en México".

Por cierto, que tuvieron muy buen ojo sus padres instalándose allí, porque si se les hubiera ocurrido hacerlo un poco más al norte, en Estados Unidos, pocos años más tarde lo habrían pasado realmente mal. Igual que les sucedió a tantos y tantos nipones o descendientes de nipones que, siendo ciudadanos norteamericanos de pleno derecho, fueron rebajados por el gobierno norteamericano a la categoría de Untermenschen en cuanto se desataron las hostilidades entre Washington y Tokio. Y no he utilizado alegremente la palabra, puesto que el democrático gobierno estadounidense trató a sus ciudadanos estadounidenses de origen japonés en forma similar a como el III Reich alemán lo hizo en un primer momento con sus ciudadanos alemanes de origen judío. Éste es un asunto poco conocido porque, después de todo, EE.UU. fue uno de los países que ganó la II Guerra Mundial y por tanto era de los "buenos" y todo lo que hiciera estaba bien hecho. Pero...

Pero se calcula que al menos 120.000 personas, la mayor parte de etnia japonesa y más de la mitad oficialmente ciudadanos de EE.UU. fueron internados de manera preventiva y sin cometer delito alguno en severos campos de concentración instalados en el interior del país entre 1942 y 1948 (hasta tres años después de finalizada la guerra). Los campos estaban cerrados con alambradas, vigilados por guardias armados y en parajes alejados de cualquier población. Los intentos de huida de estos "centros de reubicación" fueron castigados en la mayoría de ocasiones con la muerte. Nos suena el paisaje, ¿no? Para apreciar hasta dónde llegaron las cosas en la época (y hasta dónde se ha echado tierra por encima de este asunto para que se olvidara cuanto antes), leamos atentamente esta frase extraída de un artículo del democrático Los Angeles Times de la época: "Una serpiente es una serpiente, sin que importe dónde se haya abierto el huevo. Un norteamericano-japonés, hijo de padres japoneses, equivale a un japonés, no a un norteamericano". Cambiemos los términos norteamericano y japonés por alemán y judío y tendremos un titular muy muy muy parecido a los del, digamos, Volkischer Beobachter.

El responsable de internar a todos los japoneses en campos de concentración fue el teniente general John L. DeWitt, comandante de la Defensa Oeste de los EE.UU., ese hombre que recomendaba actuar contra "japoneses y otras personas subversivas de la costa del Pacífico" y que, al ordenar el comienzo de las detenciones de la población de origen oriental, decía con mucha seriedad que "el hecho de que todavía no haya ocurrido ningún sabotaje (organizado por estos ciudadanos orientales) es una perturbadora señal de que dicha acción va a ocurrir de un momento a otro". Lástima que no tuviera nadie al lado para recordarle que los elefantes africanos tienen una habilidad excepcional para camuflarse en los campos de margaritas de Europa Occidental y la mejor prueba de ello es que todavía nadie ha logrado descubrir a un elefante africano escondido en uno de esos campos.

El caso es que los norteamericanos japoneses fueron obligados a vender sus viviendas y negocios en apenas una semana (en algunos lugares incluso se rebajó ese tiempo a cuatro días), lo que les llevó a malvender sus propiedades. Uno de ellos pidió unos pocos días más para poder recolectar su cosecha antes de vender sus tierras. Como las autoridades le negaron el permiso, el enfadado campesino optó por destruirla..., y fue arrestado acusado de sabotaje. Éste es el único caso documentado de sabotaje japonés en EE.UU. durante toda la guerra. Ya lo decía DeWitt...

Aquellos nipones que colocaron sus bienes en almacenes alquilados con la idea de recuperarlos tras la guerra se encontraron años después con que sus posesiones fueron saqueadas o destrozadas. Otros que decidieron alquilar sus bienes inmuebles descubrieron al salir de los campos de concentración que los ciudadanos norteamericanos "de verdad" no habían pagado un solo recibo de alquiler, con el apoyo de las autoridades locales, o bien que habían vendido las propiedades como si fueran suyas. Otros se encontraron sin casa porque el gobierno las había expropiado porque durante sus años de prisión no habían pagado impuestos. 
  
   De acuerdo con ese estilo criminal y egoísta de los gobiernos contemporáneos (y de sus ciudadanos, como demuestra el éxito de una de las frases más cínicas que he oído nunca y que hoy está muy de moda: ésa de "prefiero pedir perdón a pedir permiso", que confiere a su usuario una máscara de audaz y valiente emprendedor con la que esconder una actitud rastrera e insolidaria dispuesta a lo que sea con tal de conseguir un beneficio propio), muchos años después el gobierno estadounidense intentó congraciarse con los supervivientes y sus descendientes con la manida ceremonia de pedir perdón y compensar con una cantidad económica insuficiente. Sucedió en 1988, en la época de Ronald Reagan, el presidente más sincero de los EE.UU. ya que llegó al puesto sin abandonar su profesión, en un claro reconocimiento de que todos aquéllos que se han sentado en el Despacho Oval fueron y siguen siendo, igual que él, unos simples actores, ejerciendo el papel de hombre-más-poderoso-de-la-Tierra.

Existe una grandísima película (confeccionada además con un bajo presupuesto) que nos permite acercarnos al ambientazo antijaponés aquí descrito, aunque generalmente se presenta como un simple largometraje anti-racista y anti-xenófobo para disimular un poco el verdadero mensaje de la historia. Se trata de Bad day at Black Rock (Un mal día en Roca Negra), traducida en español como Conspiración de silencio, protagonizada por un fenomenal Spencer Tracy, y que debería ser de visión obligada en Occidente en general y en EE.UU. en particular.
 
Toda esta digresión parecería habernos apartado bastante del que se suponía el asunto principal de este comentario pero en realidad no es así. Los japoneses, como los alemanes, son pueblos especialmente admirables pues no sólo perdieron el mayor conflicto bélico del siglo XX sino que sus respectivos países fueron arrasados y literalmente esclavizados por las potencias vencedoras durante muchos años..., y a pesar de ello el espíritu y la fortaleza de sus gentes les permitió, no ya salir adelante, sino auparse en muy poco tiempo de nuevo a los primeros puestos del desarrollo mundial, donde aún continúan. ¿Por qué?
 
En este caso, nos ceñiremos al caso de Japón, por el discurso de Kasuga Osaka. Voy a resumir brevemente sus palabras, porque merecen la pena ya que, insisto, se pueden aplicar más allá del mundo empresarial:
 
* "...Japón es un país del tamaño de Chihuahua y Aguascalientes (regiones mexicanas) juntos pero posee 124 millones de habitantes, los 10 bancos más grandes del mundo, el índice educativo y de longevidad mayor del mundo, el índice de criminalidad más bajo del mundo y un producto nacional equivalente a los que producen Francia, Inglaterra y Alemania juntos. ¿A qué se debe esta gran productividad? (...) existen cuatro puntos importantes: la educación, la actitud ante la Naturaleza, la religión y la actitud ante la vida misma..."
 
* "...en México a los padres les preocupa que sus hijos saquen un 5, un 6, un 8..., la educación instructiva y de conocimientos, pero ¿y la educación formativa? ¿Qué valores se inculcan en colegios y universidades? Entre los valores que deberíamos tener en cuenta figuran la honestidad, la puntualidad y la limpieza (...) Para un empresario de éxito existen cuatro pasos concretos: el bien ser, el bien hacer, el bien estar y el bien tener...".
 
* "...Honestidad, puntualidad y disciplina. Por ejemplo, aquí estamos unas 600 personas. Si el conferenciante llega diez minutos tarde, estamos perdiendo 6.000 minutos para esta nación. No se puede jugar con el tiempo y menos con el tiempo de los demás. El principio fundamental del respeto es: si no es tuyo, debe de ser de alguien (...) Fabrico los juguetes Kay y en mi empresa, orgullosamente mexicana, no existen llaves. Les contaré cómo contraté a la gente de mi fábrica. Yo compraba el periódico a los muchachos que lo vendían por la tarde. Les daba cien pesos y me tenían que devolver ochenta. Muchos se quedaron con la vuelta y no me devolvieron lo que me correspondía. Pero los que lo hicieron tienen hoy un porvenir porque fue a quienes contraté: ellos son hoy mis ejecutivos y directores..."
 
* "...Haz las cosas bien. Si vas a nadar, nada bien. Si vas a estudiar, estudia bien. Si vas a hacer el amor esta noche, hazlo bien. Entrégate totalmente a lo que hagas (...) Respeta la Naturaleza. En cada acto importante de tu vida planta un árbol: cuando te cases, cuando nazca un hijo, antes de cualquier acontecimiento importante. Si tus padres plantaron un árbol cuando naciste, ese árbol que tiene ahora unos veinte años es muy querido por ti, significa algo para ti. Pero si aquel árbol lo hubiera sembrado el gobierno, te importaría un comino, no lo cuidarías, te daría igual lo que ocurriera con él. ¡Y es el mismo árbol! (...) Nos quejamos de la contaminación y de la erosión pero ¿qué hacemos cada uno de nosotros para luchar contra ello?"
 
* "... En cuanto a la actitud religiosa, iberoamericanos y japoneses somos iguales: nos gustan las peregrinaciones, los amuletos, etc. Pero la diferencia es que los primeros van a los templos cristianos a pedir y esperar, mientras que los segundos acuden a los templos shintoístas sólo a ofrecer. En las negociaciones sindicales, los sindicatos hispanos presentan un pliego de peticiones y los sindicatos japoneses un pliego de ofrecimientos. Es una diferencia pequeña pero grande al mismo tiempo (...) Por ejemplo, si fabricamos mil automóviles ofrecemos al año próximo fabricar 1.200. ¿Qué ofrece la empresa a cambio? (...) A base de ofrecer, las empresas japonesas han logrado un índice de error próximo a cero, calidad total y entrega de producción en el tiempo previsto. Sin embargo, los pliegos de peticiones hispanos piden: más días no laborables, más vacaciones veraniegas, más primas, más beneficios..., ¡y nunca ofrecen nada!" 
 
* "... muchos jóvenes ya con veinte años y adultos, 'no pueden'. ¿Por qué no? Porque desde pequeñitos estuvieron escuchando todos los días: 'Eres un bruto, un flojo, la vergüenza de la familia, un malcriado, siempre te suspenden...' Y cuando llega a ser mayor, como el elefante del cuento, se limita a ir a trabajar, da las vueltas que tiene que dar, ni una más ni una menos, mueve su trompa, termina y se lo llevan al establo, donde alguien le lleva de comer. Y así muchos empleados no hacen nada más que lo justo. ¿Qué hacer? El objetivo es ser felices y disfrutar con lo que uno hace. Prepárense para que su objetivo de vida no se limite a que den las cinco de la tarde para salir de su trabajo. ¡Que triste!" 
 
* "... ¿Por qué no crean sus propias empresas? No se imaginen su primera empresa con dos hectáreas de largo. Tampoco todos los empresarios empezaron con mucho capital, no es cierto. La clave es el trabajo. Conozco en México a muchos árabes, israelíes, españoles..., que llegaron con una mano delante y otra detrás, sin amigos, a veces sin conocer siquiera el idioma ni las costumbres. Pero tenían fe en sí mismos y en el país que les acogía y trabajaron mucho y..., ahora son los empresarios de este país (...) La obligación del empresario, de los que tuvimos la fortuna de haber estudiado, es hacer dinero, pero también y sobre todo trabajar. Y dar educación a sus empleados..."
 
Ahí queda eso.
 
    

martes, 25 de enero de 2011

Me gusta reír

Me lío mucho en clase de Astrología (y ya no hablo de lo mal que lo pasé cuando estudiamos Numerología en la clase de Mancias o cuando, en la clase de Idiomas, nos tocaba algún lenguaje como el hebreo donde cada letra posee un valor numérico y por tanto una cifra concreta equivale a una o varias palabras o conceptos), porque los números nunca se me han dado bien. Se supone que son muy importantes porque actúan como abstracciones de principios y fuerzas universales y hasta dicen por ahí que son la herramienta preferida de los dioses porque para ser dios hay que ser creador y para crear hay que ser matemático (en esto no estoy de acuerdo, la verdad: para ser dios me parece más importante ser artista). El caso es que de Astrología sé lo básico para aprobar e ir tirando y tal vez por eso tengo algunos problemillas para comprender las cartas astrales empezando por la mía.

Por ejemplo, me gustaría saber si hay alguna forma de modificar mis influencias estelares para cambiar algunos aspectos de mi personalidad o al menos para manejarlos temporalmente y ponerlos en suspensión en circunstancias concretas. Así me evitaría broncas como la que me echó el otro día Epicteto cuando me descubrió riéndome a carcajada limpia con otros dos compañeros de Facultad. Me gusta reír. Me gusta mucho reír. De hecho, me paso el día riéndome (o al menos sonriendo) de muchas de las cosas que veo a mi alrededor: de mis propias meteduras de pata (tengo algunas antológicas), de las "casualidades" que me suceden (y además, cuando estoy solo: estas cosas raras no me pasan en compañía de posibles testigos), de los errores divertidos de la gente que se pretende seria, etc.  

La pregunta personal que más veces me han hecho en esta vida es: ¿Pero de qué te ríes ahora?, además de su variante ¿Por qué te ríes de mí? (ésta generalmente me la hace la gente muy pagada de sí misma que se autocontempla siempre como protagonista única e indiscutible de los hechos, porque no suelo reírme de las personas como tales sino de ciertas circunstancias en las que se ven implicadas).

La risa mueve no sé cuántos músculos de la cara y reírte un minuto es añadir un día de vida a tu existencia y no hay terapia mejor para curar y/o conservar la salud que reírse y la risa es la mejor defensa contra el miedo que nos inoculan los que gobiernan el mundo y etc. Me da igual la cantidad de frases hechas para defender la risa porque no necesito ninguno de esos argumentos. Me río porque me gusta, y punto. Eso debe venir predeterminado en la carta astrológica y por eso me gustaría saber más sobre el asunto. Sí sé que Mercurio, el dios de la comunicación, proyecta su presencia sobre mí de manera apabullante porque por lo visto me aspecta no sé cuántas influencias astrológicas. Esto explica por qué, siendo básicamente un zulú social, no tengo problemas a la hora de establecer relaciones y comunicar con la gente y precisamente en esta vida me dedico a un oficio muy relacionado con la comunicación, además de tener una facilidad de palabra hablada y escrita que a estas alturas me parece evidente. Pero no sé si Mercurio tiene algo que ver con la risa.

Bien, la bronca de Epicteto... Cuando nos descubrió a mis dos colegas y a mí charlando animadamente y riendo aún más animadamente, se plantó junto a nosotros y, tras mirarnos con severidad, advirtió:

- Guarda frecuente silencio, no digas más que las cosas necesarias y hazlo además en pocas palabras. Habla cuando lo exija la ocasión, pero no lo hagas sobre cosas triviales y comunes: no hables de juegos de azar, de deportes, de personajes sociales, bebidas o comidas, que son tema de conversación ordinaria. Sobre todo, no hables nunca de persona alguna: ni para injuriarla, ni para alabarla, ni para hacer comparaciones. Entonces, lleva tu discurso y la conversación de tus amigos a todas aquellas cosas que sean decentes y convenientes. Y si te encuentras con extraños, cállate. No rías: ni mucho, ni frecuente, ni con exceso.

Dicho lo cual, se dio la vuelta y nos dejó más helados que el témpano que adornan los esquimales en diciembre para usarlo como árbol de Navidad.

La severidad de Epicteto en este asunto me dejó muy pensativo, porque me pareció excesiva (y porque por primera vez no estaba muy de acuerdo con una de sus extraordinarias lecciones), aunque me recordó a otros autores antiguos interesantes que mostraron un comportamiento parecido. Por ejemplo al Apolonio de Tiana de la fascinante narración de Filóstrato. Este gran filósofo iniciado era capaz de materializar las mayores maravillas tanto físicas como espirituales pero, según su leyenda, adolecía del mismo aspecto adusto y carente de humor que en cierto modo amargaba sus logros. Te hacía pensar: "Sí, me gustaría ser como él pero ¿al precio de acabar siendo tan estirado como la señorita Rotenmeyer de 'Heidi'?"
Así que solicité audiencia con mi tutor, Thoth, y le pregunté a él sobre este asunto. Contradiciendo a Epicteto, el gran Djehuty sonrió con su característico gesto picudo. Luego me explicó:  

- No se lo tengas en cuenta. Los profesores sólo buscan vuestro perfeccionamiento y hacen lo imposible por ayudaros y aconsejaros de la mejor manera. Sobre todo si, como en el caso de Epicteto, se relacionan con antiguas escuelas especializadas en soportar hasta lo insoportable, como el Estoicismo. Pertenecen a una generación diferente... De todas maneras, tiene razón en que uno no debe desperdiciar fuerzas con conversaciones ni personas banales. Y que, como decían también los griegos: 'De nada, demasiado'. Y eso incluye la risa. El buen humor es un antídoto feliz para muchos venenos de la vida, pero uno no puede estar todo el día tomando medicinas si no quiere que al final esas medicinas no le sirvan de nada porque el cuerpo se haya acostumbrado a ellas. Personalmente, tienes la ventaja de poseer la risa interna. Está bien, no todo el mundo puede disfrutar de ella. Úsala siempre que la necesites..., pero no la despilfarres. Reír demasiado puede conducir al fracaso en las cosas que deben afrontarse con seriedad interna.

Dándole vueltas a esta recomendación, más tarde, empecé a pensar si a lo mejor esa falta de seriedad interna (o las risas excesivas que habían conducido a ella) podía ser la razón de los supensos en los exámenes para pasar a Tercero de Dios durante los últimos años. Pero no pude meditar mucho rato sobre esto porque me dio la risa al recordar que el encargado último de esos exámenes había sido precisamente... Epicteto.

lunes, 24 de enero de 2011

Aprendices de Frankenstein


Siendo como soy un hijo de las estrellas, un vagabundo cósmico y un espíritu libre jamás nacido (además de alumno en la Universidad de Dios), pocas cosas me espantan tanto a la vez que me parecen ridículas como el afán enloquecido de todos esos científicos (y, sobre todo, de los que les pagan cantidades astronómicas para mantener sus investigaciones) obsesionados con su persecución de la inmortalidad física. Gentes ciegas a otros planos, borrachas de materialismo, y por tanto empeñadas en aferrarse sólo a lo que pueden ver, tocar y oler físicamente. O, mejor dicho, a lo que creen que pueden ver, tocar y oler, según la dictadura de sus sentidos (aquí se escucha una risita sorda de la diosa Maya, bailando tras el escenario).

En este momento existen diversas líneas de trabajo abiertas en busca de esa tan anhelada como, en caso de que fuera posible, condena de la inmortalidad física: ansiosos herederos de Ponce de León que experimentan con sustancias exóticas y preparados extraídos de plantas saqueadas en lugares recónditos del planeta, tortuosos aprendices de la moderna alquimia genética estirando genes como si fueran chicles o, los más comunes en los últimos tiempos, discípulos  visionarios del desquiciado Herr Doktor Víktor Von Frankenstein dispuestos a hacer realidad la pesadilla del hombre-máquina... Se ve que éstos últimos no aprendieron la lección dictada por Mary Shelley: el androide, el ser construido con fragmentos de vida y de muerte, mezclando fragmentos de luz palpitante con retales en descomposición, está condenado al fracaso de la misma manera que si en un vaso agua pura y cristalina echamos una cucharada de lodo. Por mucho que queramos, el resultante nunca será agua potable, sino barro degradante.

A pesar de ello, dos noticias de las últimas semanas alimentan la pesadilla. La primera nos conduce a la empresa Evernote, creadora de una aplicación con la que se pueden tomar notas (informáticas). Pues bien, uno de los objetivos declarados de Phil Libin, uno de los mandamases de la compañía aquí a la izquierda presentando sus ideas, es transformar ese programa en otro que permita la captura de memoria para injertarla gracias a un chip en un ser humano, directamente en su cerebro, a fin de convertirse en una especie de "cerebro de repuesto". La idea es que el cliente emplee este chip para guardar y organizar todo tipo de recuerdos; por ejemplo, las fotos y direcciones de los restaurantes que conoce, y así poder olvidarse de ellos hasta que necesite ir a comer y pueda repasar su memoria artificial. De esta manera “nunca perderá esos recuerdos”. Fantástico… ¿Y el día de la muerte? ¿Qué haremos con esos recuerdos que no hemos llevado a planos inmateriales? Morirán definitivamente junto con el chip, supongo..., pero como no existe nada después de la vida material (opinión subyacente en la visión de Libin –es cuando menos paradójico que fonéticamente su apellido sea tan similar a la forma verbal inglesa “living”,que textualmente significa "viviendo"-), pues no hay nada de que preocuparse, ¿no? Puffff….

Libin habla de un plazo de un par de decenios para empezar a injertar (lo que me hace pensar que, si no existen ya chips preparados o al menos en fase experimental, les debe quedar poco para materializarlos) ya que, aunque hoy todavía resisten (resistimos) bastantes personas a ese concepto enloquecido que consiste en dejarse violar físicamente y a continuación quedar esclavizado por la tecnología, “la idea es que en un plazo largo (…) dentro de 20 años, no le importará a nadie. La gente tendrá simplemente un chip en la cabeza o algo así”. Tiene razón en algo: por desgracia, no se puede ser muy optimista viendo el futuro y resulta muy creíble que de aquí a dos decenios haya sobre la Tierra el suficiente número de tarados mentales (expresado técnicamente, sin ánimo de insultar a nadie: tarados por presentar taras en su psique) que estén dispuestos a insertarse semejante invento en aras al "avance de la ciencia" o a "disfrutar de una vida mejor".

La segunda noticia es un paso más en la cohabitación del cuerpo físico con las maravillas tecnológicas. La información llega esta vez desde la Universidad de Hong Kong donde un grupo de investigadores ha creado un sistema muy peculiar para almacenar, encriptar y descifrar datos: a través de secuencias de ADN inoculadas a un grupo de bacterias. De momento, la cantidad de información que han conseguido almacenar es de 220 Gigas en un gramo de bacterias, lo que no está nada mal teniendo en cuenta que los discos duros de los ordenadores no superan de momento los 4 Gigas por gramo. Y lo curioso es que de momento no se ha logrado una mayor capacidad no porque las bacterias no pueda acumular más información (puesto que su genoma natural posee millones de bases) sino por las propias limitaciones técnicas actuales para sintetizar estas cadenas de ADN, que no superan las 300 bases.

Según el equipo científico que trabaja en este proyecto, "creemos que estos hallazgos pueden convertirse en un estándar industrial para almacenar grandes volúmenes de información en células vivas". Información que, además puede ser encriptada gracias a un tipo de enzima que se emplea en virus y otros elementos... ¡Qué interesante! ¿Tal vez podríamos entonces insertar en estas bacterias una serie de instrucciones concretas para el comportamiento humano y luego inyectárselas a la población en general o a algún líder en particular con la excusa, digamos, de la vacuna contra la gripe, a fin de obtener un esclavo que no sepa que lo es?

 Definitivamente, la mejor prueba de la idiotez de mezclar al hombre con la máquina la tenemos en nuestros dispositivos tecnológicos actuales que, por avanzados que nos parezcan, siguen estropeándose en el peor momento con ordenadores que se "cuelgan" o pierden datos de manera sistemática en el momento más inoportuno. Sí, se supone que a medida que la técnica vaya mejorando, los errores serán menos pero ¿qué sistema material está libre de fallar? Ejemplo: el jueves y el viernes de la semana pasada este blog no pudo acudir a su cita puntual de lunes a viernes con los lectores porque la técnica falló: un gremlin en la línea telefónica incomunicó mi ordenador (aunque no mi teléfono: mmmh… Mac Namara dice que fueron "Ellos" quienes nos cortaron la línea pero como nunca me aclara a quién se refiere cuando utiliza el pronombre, tampoco sé a quién echarle la culpa exactamente) ¿Qué pasaría si se “colgara” el chip injertado en nuestro cerebro? ¿Tendríamos que “resetearnos”? ¿Cómo afectaría eso al resto de nuestra parte biológica cerebral? Aún peor: ¿qué pasaría cuándo quedara obsoleta nuestra tecnología? ¿Nos “actualizaríamos”? ¿O tendrían que desguazarnos en  un vertedero tecnológico?