Mis antepasados más remotos fueron paganos; los más recientes, herejes.

viernes, 30 de abril de 2010

Povera Patria

Es inútil presentar a Franco Battiato. Se le conoce o no se le conoce. Se ha recorrido con él los caminos de la mística, del sufismo, de la alquimia, de los profetas y los atlantes..., o no. Este siciliano de perfil característico, estilizado y sonriente como un ángel desgarbado, es la última reencarnación de los viejos minnesänger: un hombre fuera de su tiempo, fuera de todo tiempo. No time, no space. Es una de las pocas personas, poquísimas (contadas con los dedos de una mano), a las que he entrevistado a lo largo de la profesión periodística y que me ha impresionado profundamente en el contacto personal. Porque es más de lo que aparenta.

Su momento de gloria llegó durante los años ochenta, cuando cosechó un éxito tras otro a partir de su archifamoso Centro di gravitá permanente que los jóvenes bailaban enloquecidos en las discotecas sin entender la extraordinaria letra que se escondía tras su ritmo pegadizo (es una experiencia verle cantar esta canción en sus conciertos, moviéndose de un lado a otro como poseído, hasta que llega al estribillo -Cerco un centro di gravitá permanente, che non mi faccia mai cambiare idea sulle cose sulle gente...- y se queda entonces absolutamente estático, en pie, sólido como el axis mundi). Detrás siguieron otros grandes éxitos como Cuccurrucucu, Voglio vederti danzari, La stagione dell'amore, I treni di Tozeur..., y en 1985 el desembarco en España (y de ahí a Iberoamérica) con su primer álbum de éxitos traducidos a nuestro idioma: Ecos de danzas sufí. Battiato aparecía en todos los programas musicales y de variedades de la televisión, sus canciones sonaban en todas las radios, alguna entrevista se le podía leer en la prensa española. Y de pronto...

De pronto publicó en 1991 una nueva joya, a la vez en italiano y en español, titulada
Come un cammello in una grondaia/Como un camello en un canalón, en la que mostraba bien claro el hastío y la repugnancia que le producía la hipocresía, el cinismo y la maldad de nuestra sociedad contemporánea y, en especial, la suya, la italiana, sacudida por los escándalos de Tangentópolis (La ciudad de los sobornos) y el insultante poderío de la Mafia que asesinó en un brutal atentado a uno de los grandes hombres de la Italia moderna, uno de los muy pocos héroes que tuvo valor para enfrentarse a los gangsters y a los políticos corruptos que les protegían: el juez Giovanni Falcone. De ahí el título del álbum, y de la canción, que expresaba cómo se sentía en aquellos días tristes: "Vivo como un camello en un canalón, en esta ilustre y honorable sociedad. Y espero todavía una óptima ocasión para comprar un par de alas y abandonar el planeta..."

Pero la canción estrella de este disco era la primera, la que lo abría. Se titulaba Povera Patria (Pobre Patria) y resumía un sentimiento profundo, muy profundo, de amor a una tierra como nunca antes se había escuchado en la música ligera, por lo menos en Italia. Es un tema demoledor y se convirtió automáticamente en parte del repertorio de culto de Battiato, una canción para iniciados en su sapiencia musical. Fue esta canción la que acabó con su carrera de superestrella. Molestó a mucha gente, que estaba contenta ganando mucho dinero a costa de los "delirios místicos" de un músico extravagante pero que de pronto descubrió que este juglar podía mirar hacia las estrellas sin dejar de tener los pies en la tierra. Esa gente jamás le perdonó su emotivo carácter de denuncia, la conversión en himno de un grito desgarrador contra la barbarie y la estupidez que muchos italianos (y españoles, solidariamente) hicieron suyo. De pronto, Franco Battiato dejó de escucharse en las emisoras de radio, ya nadie le llevaba a los programas de televisión, fue vetado, como si se le hubiera tragado la tierra. Y lo cierto es que se intentó echar tierra sobre él, condenar su carrera. Sin embargo, era tarde para eso. Povera Patria constituía en el fondo sólo un ladrillo más en un sólido edificio musical que ya conocíamos demasiadas personas. El hecho de intentar deshacerse de él simplemente le convirtió en leyenda. Y las leyendas son inmortales.

A partir de entonces siguió publicando disco tras disco, ofreciendo nuevos éxitos que quizá ya no haya disfrutado el público en general pero sí todos aquéllos que le conocemos desde hace tantos años y que tuvimos la fortuna de escucharle alguna vez: Lode all'Inviolato, Breve invito a rinviare il suicidio, La Cura, Il ballo del potere, La canzone dell'amore perduto, Bist du bei mir, Io chi sono? y tantas otras..., hasta el día de hoy, en el que todavía resiste a pesar de sus 65 años (¡y hay quien pretende jubilar a esa edad a los creadores!).

Hoy, viendo lo que sucede en España, en manos de quién estamos y en qué tipo de sociedad nos han enfangado y siguen enfangando, creo que la "canción maldita" de Battiato debe sonar más que nunca, para hacer reflexionar a más de uno. La transcribo a continuación en su italiano original, y en español:


Povera patria! Schiacciata dagli abusi del potere

(¡Mi pobre patria! Aplastada por los abusos del poder)
di gente infame, che non sa cos'è il pudore,

(de gente infame, que no sabe lo que es el pudor,)
si credono potenti e gli va bene quello che fanno;

(se creen los dueños todopoderosos)
e tutto gli appartiene.

(y que todo les pertenece)

Tra i governanti, quanti perfetti e inutili buffoni!
(Los gobernantes: ¡cuántos perfectos e inútiles bufones!)
Questo paese è devastato dal dolore...
(en este país devastado por el dolor)
ma non vi danno un po' di dispiacere

(¿pero acaso no sentís ni un poco de incomodidad)
quei corpi in terra senza più calore?
(ante esos cuerpos tendidos sin vida?)
Non cambierà, non cambierà,

(No cambiará, no cambiará,)
no cambierà, forse cambierà.
(No cambiará, quizá cambiará.)
Ma come scusare le iene negli stadi e quelle dei giornali?

(¿Y cómo excusar a esas hienas en los estadios y a esos periodistas?)
Nel fango affonda lo stivale dei maiali.
(Chapoteando en el fango como cerdos)
Me ne vergogno un poco, e mi fa male
(Yo me avergüenzo un poco, y me hace daño)
vedere un uomo come un animale.
(ver a los hombres comportarse como animales.)
Non cambierà, non cambierà,

(No cambiará, no cambiará,)
sì che cambierà, vedrai che cambierà.

(Sí que cambiará, tendrá que cambiar)
Voglio sperare che il mondo torni a quote più normali
(Esperamos que el mundo vuelva a niveles más normales)

che possa contemplare il cielo e i fiori,
(que pueda contemplar con calma el cielo,)
che non si parli più di dittature

(que no se hable nunca más de dictaduras)
se avremo ancora un po' da vivere...

(aunque tendremos que ir tirando...)
La primavera intanto tarda ad arrivare.
(Mientras tanto, la primavera tarda en llegar.)



Ésta es la canción, ácida e inteligentemente ilustrada, con fotografías de personajes que no resultarán desconocidos a los conocedores de la realidad política italiana de los últimos veinte años:



4 comentarios:

  1. Me quedo con "Nómadas", "Despertar en primavera", "Yo quiero verte danzar" y "La era del Jabalí Blanco". Espero que ésta llegue pronto...

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  2. le echaba de menos... es de los que siempre siempre escucho

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  3. Soy Italiano y amo su musica no quiero ofender nadie pero en la traducción hay errores. Dispiacere no significa incomodidad, es lastima. No es "chapoteando nel fango como cerdos", es "En el fango se unde la Bota (Italia) de los cerdos, no es "aunque tendermo que ir tirando" es "si tendremos todavia que vivir un poquito". Esta canción fue escrita como signo de protesta en contra principalmente del governo socialista que en aquellos años tenia contatcto con los boss della mafia. En este periodo la mafia acosó un durisimo golpe por partes de Falcone e Borsellino los unicos que se enfrentaban a la Mafia de verdad, En el Maxiprocesso (maxijuicio)encarcelaron mas de 900 mafiosos, muchos de ellos jefes importantes. Cuando empezaron a descubrir la verdad sobre los politicos "collusi" con la mafia, le pararon los pies, no les dieron tiempo para investigar, los mataron...Aquello fue el dia que, para muchos italianos, Italia se murió. Aquí http://www.youtube.com/watch?v=rHN_IeseHKs&feature=fvsr

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  4. Pero a Falcone le mataron en 1992 y este album se publicó en 1991. A excepción de este detalle me encanta el post.

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